Tanto importa el fondo como la forma. A la hora de sorprender a tus invitados no solo es importante el menú. Tu receta perfecta quedará sublime si sabes presentarla con gracia y elegancia. Te damos cinco consejos para decorar tu mesa en la cena de Nochebuena o la comida de Navidad.
Menos es más. A menudo tendemos a recargar la decoración de la mesa de Navidad y llenarla de objetos, como velas, figuras o centros de flores. Si ya somos muchos y casi no cabemos en el comedor, es mejor decorar con motivos sencillos, utilizar una bonita vajilla y dejar la mesa lo más despejada posible para la comida y la bebida.
Armonía. Otra buena idea es elegir el mantel en función de la vajilla y la cristalería. Huyamos de los manteles de Navidad con motivos recargados y optemos por colores que vistan la mesa y den armonía. Tonos en rojo, añil o blanco (para una vajilla muy colorida) pueden ser una buena opción.
Mesa auxiliar. En la línea de aligerar la mesa, hay soluciones prácticas como situar algunos elementos como la cesta con los panes, la jarra de agua o las botellas en una mesa auxiliar. Evitará, además, el efecto de las botellas de refrescos y cerveza encima de la mesa. Las bandejas de varios pisos vuelven a estar de moda para el centro de la mesa de Navidad y no solo sirven para los mazapanes y turrones, sino para presentar el plato principal y las guarniciones.
Un toque personal. Si quieres sorprender a tus invitados, además de la decoración navideña, personaliza el servilletero con su nombre o escríbelo en una tarjeta individual. Organizarás así a los comensales para que sepan dónde sentarse y tendrán un bonito detalle para alegrar las fiestas. ¡Seguro que se lo llevan de recuerdo!
Sobremesa. Esta celebración gastronómica debe tener su culminación con los brindis de Navidad. Para ponernos al día con familia y amigos aprovechando que es una de las pocas veces al año en que conseguimos reunirnos todos juntos. Y en este momento relajado, unas velas acompañadas con las típicas guirnaldas o una ramita de acebo darán un toque íntimo y navideño a la velada. ¡Feliz Navidad!
